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Los padres son los primeros y principales educadores:

“Por el hecho de haberle dado la vida los padres asumieron la responsabilidad de ofrecer a sus hijos condiciones favorables para su crecimiento y la grave obligación de educarlos”.

La sociedad ha de reconocerlos como los primeros y principales educadores. El deber de la educación familiar como primera escuela de virtudes sociales es de tanta trascendencia que cuando falta, difícilmente, puede suplirse. Este principio es irrenunciable (DA339). Los hijos tienen el derecho de poder contar-siempre que sea posible- con el padre y la madre para que cuiden de ellos y los acompañen hacia la plenitud de la vida.

Para educar, y especialmente en el seno de la familia, es necesario que los padres y los educadores no renuncien a su tarea, frente a sus hijos y/o estudiantes, de corregirlos; pero también y de forma muy especial, de acompañarlos en la definición de su proyecto de vida y de la maduración de su fe. No se trata de quererlos bien y de querer el bien que favorece su crecimiento humano y cristiano.

Asociación de Padres

Entre sus principales funciones están:

Apoyar

Apoyar las actividades que contribuyan al desarrollo de hábitos, valores y actitudes en beneficio de la mejora de los aprendizajes de los estudiantes en cumplimiento al calendario escolar, garantizando que se cumplan con las horas de docencia aprobadas en cada año escolar.

Promover

Promover una buena comunicación y relaciones interpersonales entre los padres, madres y/o tutores junto a los docentes, alumnos y personal administrativo, para garantizar el cumplimiento de los objetivos y metas planteadas en los planteles educativos.

Fomentar

Fomentar y dar seguimiento a las actividades que propicien el trabajo educativo en familia en beneficio de los aprendizajes de los estudiantes.

Interactuar

Interactuar con las familias de estudiantes y propiciar por esta vía un clima de armonía familiar.

La Familia

Integrada a la misión educativa como primera educadora de los hijos, mantiene relaciones armónicas, vive con amor y en unidad, promueve desde el hogar la formación en valores, con espíritu colaborador, crítica, responsable, disponible, forma con el ejemplo, abierta a los planes de Dios, y promotora de la Fe en Jesucristo.

Conoce sus deberes y derechos, participa en los procesos de formación de sus hijos, atenta a los llamados de sus maestros-as. Apoya las diversas actividades programadas, por el Centro. Da seguimiento desde la casa al trabajo que se realiza en la escuela.

Está organizada en comité de curso, asociación de padres y madres, y participa de la Escuela para Padres, Madres y Tutores y en la Pastoral Familiar. Ayuda de manera organizada, activa y constante. Sugiere, propone, informa. Se involucra en los diferentes equipos de apoyo, comparte su tiempo y colabora en la gestión de recursos a favor de las necesidades del centro.